Un bello dicho asegura que nunca es tarde para hacer lo correcto. Tarde, pues, no solo hago lo correcto, sino aquello que considero justo, lindo, ilusionador: felicitar vuestra labor y vuestro coraje. Son tiempos difíciles para las palabras libres, para el compromiso distinto a la corrección política y a la unilateralidad, tiempos de dogmas de fe y de imposición de criterios. Tiempos en que el pensamiento único anula al pensamiento, y la pancarta sustituye al debate, la consigna a la idea, la propaganda a la información.
Israel sufre de todos estos males, permanentemente azorada por los prejuicios, la desinformación y la criminalización. Su derecho y sus derechos son permanentemente ninguneados, sus enemigos, engrandecidos, el terrorismo que padece, minimizado, su dolor, ignorado. Tierra milenaria, depositada de una sabiduría profunda, es hoy pasto de la violencia de unos, y del desprecio de otros, y su pueblo, como tantas veces en la historia, está prácticamente solo.
En estos tiempos difíciles para Israel y para su defensa, asociaciones como la vuestra son Menorahs luminosas, pequeñas luces en el camino de lo justo. Gentes valientes, dispuestas a padecer incomprensión. Gentes sinceras, comprometidas con la verdad. Gentes libres, sin las atadurasde la imposición del pensamiento. Como persona comprometida con Israel y a existir en paz y en armonía, solo puedo expresaros mi alegría y mi felicitación. Con vosotros, algunos nos sentimos menos solos. Con vosotros, el mundo es mejor.
Pilar Rahola
